domingo, 25 de enero de 2009

FAMILIAS COMO DIOS QUIERE

El obispo de San Cristóbal de las Casas, monseñor Felipe Arizmendi Esquivel, ha escrito el siguiente análisis al concluir el V! Encuentro Mundial de las Familias en la Ciudad de México, celebrado del 14 al 18 de enero.
En su reflexión, monseñor Arizmendi Esquivel toca un tema central del Encuentro, es decir, la necesidad de seguir apoyando a la familia tradicional contra las políticas y las modas que pretenden desvirtuarla, desvirtuando así a la misma Iglesia. 
A continuación publicamos la versión íntegra del análisis del obispo de San Cristóbal de las Casas. 
Con ocasión del VI Encuentro Mundial de la Familia, no faltaron voces acusando a la Iglesia Católica de seguir en la Edad Media, porque dicen que el modelo de familia que defendemos, ya no corresponde a los parámetros por los que va la sociedad. Afirman que es anacrónico sostener que la familia consta de un padre, una madre y los hijos, cuando existen muchos otros estilos, incluso de uniones entre el mismo sexo. Nos gritan que debemos ser más incluyentes y tolerantes; de lo contrario, seguiremos perdiendo feligreses. 
 

miércoles, 7 de enero de 2009

Veinte misioneros asesinados durante el año 2008

Se trata de monseñor Paulos Faraj Rahho, arzobispo de Mosul (Irak), de dieciséis sacerdotes, un religioso y dos voluntarios laicos.
Por continentes, es en Asia donde se ha producido mayor número de asesinatos: seis sacerdotes y una voluntaria laica, además del prelado iraquí, perdieron la vida en Iraq, India, Sri Lanka, Filipinas y Nepal.
A esta lista provisional, afirma la agencia Fides, hay que añadir "la nube de soldados desconocidos de la gran causa de Dios", según la expresión que acuñó hace unos años el Papa Juan Pablo II, "de los que no se tiene noticia, y que en muchos rincones de la tierra sufren y pagan con su vida la fe en Cristo".
El recuento de Fides incluye algunos casos de asesinatos violentos, aunque no hayan sido cometidos expresamente "por odio a la fe" en sentido estricto.
Algunos, como el padre Brian Thorp, asesinado en su parroquia de Lamu (Kenia) perdieron la vida en aparentes intentos de robo, o perecieron al ser asaltados por las calles mientras ejercían su ministerio, quizás sólo para robarles el coche.
Otros fueron eliminados porque oponían con tenacidad el amor al odio, como el padre Bernard Digal, primer sacerdote católico muerto en la campaña de violencia anticristiana llevada a cabo por los extremistas hindúes en el Estado indio de Orissa.